El TSJ cambió la calificación de un policÃa condenado por gatillo fácil: de homicidio calificado a simple. La defensa no lo habÃa pedido. Las consecuencias.
Mientras los medios destinan generosos espacios a «delincuentes» de poca monta o a estigmatizar a vÃctimas mujeres, suceden otras cosas bastante más graves.
El policÃa Claudio Salas fue condenado a prisión perpetua por el asesinato del adolescente Braian Hernández, de 14 años.
Cuando cometió el asesinato, Salas vestÃa de policÃa, estaba trabajando en un control policial, y usó su arma reglamentaria.
La defensa nunca cuestionó la calificante de abuso de su función. En cambio, intentó probar una supuesta legÃtima defensa de una compañera, también policÃa.
La condena fue confirmada por el Tribunal de Impugnación y llegó, con ese agravio de la defensa, a la sala penal del Tribunal Superior de Justicia.
Integrada por subrogantes, la sala penal resolvió, de manera dividida, cambiar la calificación y bajarla a homicidio simple. Aunque la defensa no habÃa pedido eso.
La sala penal decidió que el agravante no estaba suficientemente fundando. Y no lo estaba porque la defensa nunca lo cuestionó.
Aquàestá el fallo en pdf. Pueden leerlo y sacar sus conclusiones.
La sala estuvo integrada por Ricardo Kohon y Evaldo Moya. Para desempatar convocaron a Ricardo Cancela, defensor general.
Kohon y Cancela formaron la mayorÃa. Moya quedó, en soledad, con su voto que propiciaba rechazar el recurso de la defensa.
Cancela no fue recusado pese a sus antecedentes de defensor de policÃas, por ejemplo de los ex jefes Carlos Zalazar y Moisés Soto, imputados en la causa de la zona liberada.
Este fallo abre una puerta para que otros policÃas condenados con el agravante del abuso de su función tengan esperanzas de obtener similar beneficio que Salas.
Por ejemplo Héctor Méndez, hallado culpable por un jurado popular. Y hasta se debe esperanzar José Poblete, condenado por el asesinato del maestro Carlos Fuentealba.
Esta inquietante resolución aparece en medio de un conflicto polÃtico policial, que incluyó disparos contra la casa del subjefe de la policÃa y la exoneración de tres suboficiales que pretendÃan formar un sindicato policial.
Y en medio de una construcción sistemática de que supuestas «bandas de delincuentes» tienen en jaque a Neuquén, con el consiguiente pedido de mano más dura.
la sentencia de juicio empieza afirmando que las partes lo único que discuten es la legÃtima defensa, se supone que en el juicio se discute lo que las partes controvierten, lo dijo en otros fallos el tsj, y ahora meten por la ventana un nuevo argumento (dirÃa que sorprenden hasta a la propia defensa, que nunca se le ocurrió pensar esa alternativa). otra cosa que me llama la atención es que el voto mayoritario afirma que se dio por probada la existencia de un arma que tenÃa la vÃctima (¿?), incluso el primer voto del tsj alude que eso nunca se dio por probado, en fin, sentencia polÃtica sin lugar a dudas, firmada por dos personajes ligados al sobichismo, la relación que realizan en esta nota con el conflicto policial es acertada. Me queda otra duda, corresponde que remitan directamente para fijación de pena?, no deberÃa anularse la sentencia de impugnación y realizar una nueva con otra conformación? (no lo afirmó, es mi duda).
Los jueces del TSJ ni siquiera le agregaron la agravante genérica de haber cometido el homicidio con un arma de fuego, directamente le pusieron homicidio simple, una aberración jurÃdica. Ese fallo es directamente nulo por expedirse respecto de cuestiones no reclamadas por la defensa y por aplicar en forma errónea la calificación jurÃdica que arbitrariamente eligieron. Están preparando el terreno para Poblete.